OLPC Argentina/Plan comunitario/Capacitacion docente
La capacitación docente deseable para sacarle el jugo a un proyecto de laptops 1-a-1 podemos dividirla en dos clases:
- Capacitar sobre cómo usar las laptops.
- Capacitar sobre cómo enseñar para aprovecharlas.
En esta página analizamos estas dos clases y debatimos sobre el grado de necesidad de capacitación formal.
- Ver también página de la wiki de Tuquito sobre capacitación
Capacitación sobre cómo usar las laptops
Consideremos que:
- Las laptops serán fáciles de usar.
- Los chicos las tendrán a su disposición todo el tiempo.
- Habrán programas tutoriales, animaciones, videos, etcétera, para aprender a usarlas.
- Las laptops comunicarán a los chicos y docentes con sus pares, aunque estén físicamente alejados, pudiendo realizarse consultas y aprender por imitación.
Viendo estos considerandos, podemos esperar que los chicos aprendán a utilizar las laptops con mucha menos ayuda de maestros y padres de la que necesitan hoy en día para aprender a usar la PC del laboratorio de la escuela o de la casa. Lo mismos argumentos cuentan para la capacitación docente. Como cada uno tendrá su laptop, los tutoriales, la prueba/error y las consultas con sus pares serán potentes recursos para que aprendan a manejarlas, minimizándose la necesidad de capacitación formal en lo que hace a la operación de las máquinas.
La experiencia sobre capacitación docente en laboratorios no es un antecedente igual, porque en ellos las computadoras están a disposición de los docentes sólo unas pocas horas por semana y las interfaces al usuario son más complejas. Por las mismas razones, en un modelo de laboratorios, los chicos necesitan más ayuda de los docentes. Es así que, en ese modelo, la capacitación docente en cuanto a la operación de las máquinas es sensiblemente más difícil y más necesaria a la vez. Además, es presumiblemente más cara, porque hay que asignar un aula y un profesor (el poco tiempo y la dificultad hacen menos viable aprender de tutoriales) y probablemente se deba incentivar más a los docentes, dado el requerimiento de asistencia regular a clases y que no se les está dando una laptop.
Repasemos la validez de los cuatro considerandos anteriores. Que los chicos y maestros tendrán la laptop disponible es un hecho, dado que es el quid del proyecto. Que habrán tutoriales y ese tipo de contenidos también lo es, porque la comunidad de voluntarios desarrollando aplicaciones es grande, preparar esos tutoriales es relativamente simple y el auto-aprendizaje es parte del espíritu del proyecto. Que las laptops comunicarán a chicos y docentes con sus pares también es un hecho, aunque puede argumentarse que para estar comunicados ellos deben saber usar las laptops y por lo tanto no es un recurso aprovechable para aprender la operación básica.
En cambio el primer considerando es más debatible. ¿Qué nos puede hacer pensar que las laptops serán más fáciles de usar que una PC moderna? En lo que respecta a los chicos, que se pueden obviar metáforas que ellos no manejan, como la de archivos de carpetas. Pero más importante es algo que importa a chicos y adultos: las laptops no necesitan tener tantos features y flexibilidad como una PC normal. Pueden tener muchos menos botones, íconos, menúes, opciones de configuración, incluso programas, pero seguir ofreciendo una experiencia pedagógica significativa. También partamos de la base de que una PC moderna no es tan difícil de usar, si se tiene suficiente tiempo con ella.
Otro argumento en contra es que muchos educadores, de todas formas, no aprenderían a usar las laptops. Hay estudios que dicen que aproximadamente la mitad de nuestros maestros nunca utilizó una computadora [citation needed] y que sólo un 10% a 12% alguna vez empleó los recursos del portal oficial sobre educación (educ.ar) [citation needed], lo que significa una alfabetización digital muy baja. Pero veamos el vaso medio lleno: esa mitad de los maestros que sí usó una PC [revisar la cita de arriba para ver si esto es verdad], aunque haya sido alguna vez en un laboratorio escolar o un cybercafé, seguramente podrá aprender a usar la laptop. La otra mitad pudo tener mil razones para no usar nunca PC: no tuvieron una disponible, no habían tutoriales o profesores, no tuvieron incentivos, etc. Muchas de estas barreras dejarían de existir con el proyecto de las laptops.
El grupo remanente, cerrado ante la tecnología, es probablemente solo una pequeña fracción de esa mitad. Se pueden idear soluciones ad-hoc para ese grupo. ¿Pero rechazar el proyecto por ellos? Aunque tengo confianza en que la mayoría de los maestros es capaz de aprender a usar las laptops (cuando las cuatro condiciones citadas arriba estén dadas, claro está) creo que efectivamente va a haber una minoría que no sea capaz, dado que he visto maestros que incluso carecen de una comprensión lo suficientemente profunda de sus propias materias. Pero si reconocemos que hay maestros así ¿no es mejor que los chicos tengan laptops que les permitan aprender por su cuenta los temas en los que sus maestros fallan? Que en esas materias las laptops sean usadas sólo como ebook, o no usadas, ¿es un costo tan grande? Además, los maestros que aprendan a usar las laptops pero tengan falencias en ciertas áreas pedagógicas, podrán capacitarse con ayuda de sus nuevas máquinas.