OLPC:Style guide

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                                  El Tabaquismo

El tabaquismo es una de las principales causas de muerte en el mundo. Tiene mas de 1000 sustancias toxicas entre ellas el alquitran y la nicotina. El tabaquismo es una enfermedad crónica sistémica perteneciente al grupo de las adicciones. Causa enfermedades cardiacas y pulmonares. Actualmente se cree la causa principal mundial de enfermedad y mortalidad evitable. Se la considera una enfermedad adictiva crónica con posibilidades de tratamiento.

          Problemas de salud asociados al tabaquismo

El fumar puede ser el causante de varias enfermedades, como el cáncer de pulmón, la bronquitis tipo R2, el enfisema pulmonar (perforación de los pulmones), y un tipo de gripe dañina por la cual el cerebro puede absorber el agua que ingerimos.

El tabaquismo es reconocido desde hace varios años como un problema de salud pública, debido a que los daños a la salud asociados al consumo del tabaco causan más de medio millón de muertes en el continente americano. El fumar es la causa más frecuente de muertes que pueden evitarse. Según los últimos informes, cientos de miles de personas mueren anualmente de forma prematura debido al tabaco. Estudios recientes indican que la exposición al humo de los cigarrillos fumados por otra gente y otros productos del tabaco, producen al año la muerte de miles de personas que no fuman Pese a estas estadísticas y a numerosos avisos sobre los peligros de fumar, millones de adultos y adolescentes siguen fumando. De todos modos se están haciendo progresos: cada día son más las personas que dejan de fumar.

En el año 2004, la Organización Mundial de la Salud estimaba en 4,9 millones el número de muertes anuales relacionadas con el consumo de tabaco. Pese a existir una probada relación entre tabaco y salud, esto no impide que sea uno de los productos de consumo legal que puede matar al consumidor asiduo.

Fumar un sólo cigarrillo da lugar a una elevación del ritmo cardíaco, la frecuencia respiratoria y la tensión arterial. El humo produce una reacción irritante en las vías respiratorias. La producción de moco y la dificultad de eliminarlo es la causa de la tos. Debido a la inflamación continua se produce bronquitis crónica. También produce una disminución de la capacidad pulmonar, produciendo al fumador mayor cansancio y disminución de resistencia en relación a un ejercicio físico. Cáncer

Determinadas sustancias cancerígenas del humo del tabaco que pasan a la sangre inducen cáncer en varios órganos, principalmente en los pulmones, la laringe y la boca.

                  Aparato circulatorio  

Los efectos del tabaco aumentan la aparición de arteriosclerosis, favoreciendo el desarrollo de trastornos vasculares, cerebrales y cardíacos.

También afecta a los miembros inferiores y puede aparecer la enfermedad vascular periférica.

                     Fumadores pasivos 

Son aquellas personas que no fuman, pero que están en contacto constante con los fumadores e inhalan el humo del cigarro; los fumadores pasivos también pueden contraer problemas en las vías respiratorias.

                Dependencia física de la nicotina 

No existe hoy día una opinión unánime acerca de la importancia de la dependencia física a la nicotina como mayor o único componente de la adicción. Allen Carr, creador de un conocido método para dejar de fumar, afirmaba que aunque la ansiedad provocada por la retirada de la nicotina es físicamente real, es mucho más leve de lo que aparenta. Por tanto, esta ansiedad, aunque existente, podría estar multiplicada en la mente del fumador por factores sociales, situaciones de estrés o sus propios temores, lo que, de ser cierto, agregaría un componente psicológico muy importante a la adicción física. Los problemas de salud a los que se exponen quienes son presas de esta enfermedad son innumerables. Destacan los problemas cardiovasculares, como hipertensión y riesgo de ataque cardiaco. También se encuentra el riesgo muy elevado de padecer diferentes tipos de cáncer, donde el de pulmón ocupa el primer lugar, seguido de la laringe y boca, entre otros. Por otro lado, existe el peligro latente de desarrollar EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), en donde la capacidad respiratoria se va minando poco a poco y de manera irreversible, disminuyendo la calidad de vida de quien la padece de manera dramática. Otras afecciones muy inconvenientes, son el riesgo de sufrir de colesterol elevado, envejecimiento prematuro de la piel, osteoporosis, manchas en los dientes o caries y mal aliento (halitosis), infertilidad primaria en los hombres, úlcera, gastritis, colitis, bronquitis, así como dificultades durante el embarazo o afecciones en el bebé. El principal problema es que muchas de estas enfermedades son silenciosas, y no dan aviso hasta que ya han afectado al organismo de manera grave. Se desarrollan muy lentamente, lo que hace que el fumador no se dé cuenta de que está alimentando un padecimiento que en la mayoría de los casos es crónico e irreversible. Sustancias venenosas El gran daño que hace el tabaquismo a los fumadores, se explica por la cantidad de sustancias nocivas que componen un cigarrillo. Cada vez que se inhala el humo del tabaco, se introducen al organismo más de cuatro mil sustancias nocivas, entre las que destacan monóxido de carbono, dióxido de carbono, cianuro de hidrógeno, amoniaco y partículas de plomo y arsénico, entre otras. En cuanto a los tipos de cigarrillos conviene saber esto. Los cigarros lights son más perjudiciales que los normales por dos razones principalmente. En primer lugar, durante su producción se les añade diversos productos químicos que contienen nitrógeno, lo que los hace más dañinos. Además, debido a que tienen un poco menos de nicotina, comúnmente se inhalan de manera mucho más profunda para que cumpla con los requerimientos de esta sustancia, a los que el organismo ya está acostumbrado. Otro de los penosos y muy injustos aspectos del tabaquismo, es que incluso miles de personas que no fuman, y que se exponen frecuentemente al humo del cigarrillo, llamados fumadores de segunda mano o pasivos también padecen las mismas complicaciones de salud. Debemos de tomar en cuenta, que en cuanto a espacios cerrados, no hay un radio seguro en el que podamos decir que estamos a salvo de las sustancias nocivas del humo. En este sentido, las “áreas de no fumar” de los sitios públicos no están libres de contaminación por el cigarrillo. Es muy importante destacar también, sobre todo en aquellos adultos que están iniciando una familia, que son mayores las posibilidades de que los hijos de fumadores se conviertan también en fumadores, y a muy temprana edad. Esto como resultado de la imitación y de la facilidad con la que los niños y adolescentes pueden disponer de cigarros en su propia casa. Las estadísticas se elevan cuando es la madre quien fuma, ya que pasa generalmente más tiempo con los hijos. Adicionalmente al detrimento de la salud, de la propia y la de los seres cercanos, los costos económicos resultan considerables. Si tan sólo hiciéramos el ejercicio de ver cuánto gastamos en cigarrillos al año, veríamos que podríamos destinar esta cantidad a algún otro rubro que actualmente quizás no podemos considerar dentro de nuestros gastos, como podría ser el pago de un gimnasio, ropa o diversiones.

El mecanismo de la adicción Alguna vez se ha preguntado, ¿por qué fuma? Y si ya lo ha intentado, ¿por qué es tan difícil dejar de fumar? La razón se encuentra en la nicotina, una de las principales sustancias que componen el tabaco y que es altamente adictiva, incluso más que la cocaína. Al ingresar en el organismo, la nicotina se transporta a lo largo de 300 o 400 millones de alveolos y en menos de 10 segundos llega al cerebro. Aquí, esta sustancia promueve la liberación de dopamina, que es una hormona que normalmente se libera cuando estamos experimentando sensaciones de bienestar, por lo que nos induce a un estado de placer. Es por esta razón que nos acostumbramos a vivir con esta sensación placentera de manera permanente, y más aún, un cigarrillo se hace imprescindible en los momentos en que nos sentimos inseguros, preocupados, ansiosos o deprimidos, ya que gracias al cigarrillo desaparecen estos factores negativos. El efecto de satisfacción que nos brinda un cigarrillo dura aproximadamente media hora, por lo que la necesidad de mantenernos en un estado de ánimo “elevado”, induce a muchas personas a fumar incluso más de una cajetilla al día. Por otro lado, el cigarro forma parte de un esquema social, difícil de abandonar. En las reuniones con amigos, donde se comparte vino o café, el cigarrillo llega a formar un elemento imprescindible, que estimula y da seguridad durante la convivencia. Sin éste, el fumador se siente incómodo, y puede tener dificultad incluso para mantener una conversación o asociar ideas.

El principio para dejarlo Cuando tratamos de dejar de fumar sin ningún tipo de apoyo resulta muy difícil, ya que al suspender el suministro de nicotina al que está fuertemente acostumbrado el cerebro y el organismo, se sufre del casi insoportable síndrome de abstinencia. Éste consiste en sensaciones de irritabilidad, nerviosismo, mal humor, depresión y hasta insomnio y estreñimiento; tan difícil de sobrellevar, que la mayoría de quienes lo sufren prefieren volver a fumar, en lugar de padecer esto. Por lo tanto, hay que tener muy claro que dejar de fumar no es una cuestión de fuerza de voluntad. Es necesario que a este problema se le considere como una enfermedad que requiere de un tratamiento integral para solucionarlo. Además de la fuerza de voluntad, es necesaria la atención de un médico que evalúe las particularidades de cada fumador, es decir, sus patrones de conducta relacionados con el hábito de fumar, para que establezca un tratamiento dirigido a su caso en particular. En el caso de un adulto que ha fumado durante 30 o 40 años, su dependencia al cigarrillo es más de tipo físico, pero en el caso de un adolescente, es generalmente de tipo emocional. Algunos productos que se utilizan como auxiliares para dejar de fumar son las gomas de mascar o parches de nicotina, que sustituyen el suministro de esta sustancia al organismo. Por otro lado, un medicamento muy avanzado para dejar de fumar, y de reciente puesta en el mercado se llama Chantix. Este medicamento actúa produciendo el mismo efecto de satisfacción que la nicotina de cigarrillo, pero moderadamente, lo que ayuda a los fumadores a mantenerse más tiempo sin fumar. De manera complementaria, ofrece la ventaja de reducir los síntomas de ansiedad que se experimentan cuando siendo adicto al cigarro, se suspende el hábito de fumar. Adicionalmente, si durante el tratamiento se fuma, la sensación que produce el cigarro será muy desagradable, por lo que se abstendrá la persona de fumar. Lo importante es saber que si ha tomado la decisión de dejar de fumar, no está solo. Hay varias clínicas especializadas para dejar de fumar tan sólo en la Ciudad de México. En éstas se cuenta con personal profesional y capacitado, médicos y psicólogos, principalmente, que podrán apoyarlo para que logre su propósito de una manera exitosa. Dejar de fumar lo hará sentirse mucho más sano, libre por no depender de una adicción para sentirse bien, con más vitalidad y a salvo de muchas enfermedades que podrían afectar dramáticamente su calidad de vida, o la de las personas más cercanas a usted. El mejor momento para tomar la decisión es éste, no lo deje pasar.

                                 El Tabaquismo

El tabaquismo es una de las principales causas de muerte en el mundo. Tiene mas de 1000 sustancias toxicas entre ellas el alquitran y la nicotina. El tabaquismo es una enfermedad crónica sistémica perteneciente al grupo de las adicciones. Causa enfermedades cardiacas y pulmonares. Actualmente se cree la causa principal mundial de enfermedad y mortalidad evitable. Se la considera una enfermedad adictiva crónica con posibilidades de tratamiento.

         Problemas de salud asociados al tabaquismo

El fumar puede ser el causante de varias enfermedades, como el cáncer de pulmón, la bronquitis tipo R2, el enfisema pulmonar (perforación de los pulmones), y un tipo de gripe dañina por la cual el cerebro puede absorber el agua que ingerimos.

El tabaquismo es reconocido desde hace varios años como un problema de salud pública, debido a que los daños a la salud asociados al consumo del tabaco causan más de medio millón de muertes en el continente americano. El fumar es la causa más frecuente de muertes que pueden evitarse. Según los últimos informes, cientos de miles de personas mueren anualmente de forma prematura debido al tabaco. Estudios recientes indican que la exposición al humo de los cigarrillos fumados por otra gente y otros productos del tabaco, producen al año la muerte de miles de personas que no fuman Pese a estas estadísticas y a numerosos avisos sobre los peligros de fumar, millones de adultos y adolescentes siguen fumando. De todos modos se están haciendo progresos: cada día son más las personas que dejan de fumar.

En el año 2004, la Organización Mundial de la Salud estimaba en 4,9 millones el número de muertes anuales relacionadas con el consumo de tabaco. Pese a existir una probada relación entre tabaco y salud, esto no impide que sea uno de los productos de consumo legal que puede matar al consumidor asiduo.

Fumar un sólo cigarrillo da lugar a una elevación del ritmo cardíaco, la frecuencia respiratoria y la tensión arterial. El humo produce una reacción irritante en las vías respiratorias. La producción de moco y la dificultad de eliminarlo es la causa de la tos. Debido a la inflamación continua se produce bronquitis crónica. También produce una disminución de la capacidad pulmonar, produciendo al fumador mayor cansancio y disminución de resistencia en relación a un ejercicio físico. Cáncer

Determinadas sustancias cancerígenas del humo del tabaco que pasan a la sangre inducen cáncer en varios órganos, principalmente en los pulmones, la laringe y la boca.

                 Aparato circulatorio  

Los efectos del tabaco aumentan la aparición de arteriosclerosis, favoreciendo el desarrollo de trastornos vasculares, cerebrales y cardíacos.

También afecta a los miembros inferiores y puede aparecer la enfermedad vascular periférica.

                    Fumadores pasivos 

Son aquellas personas que no fuman, pero que están en contacto constante con los fumadores e inhalan el humo del cigarro; los fumadores pasivos también pueden contraer problemas en las vías respiratorias.

               Dependencia física de la nicotina 

No existe hoy día una opinión unánime acerca de la importancia de la dependencia física a la nicotina como mayor o único componente de la adicción. Allen Carr, creador de un conocido método para dejar de fumar, afirmaba que aunque la ansiedad provocada por la retirada de la nicotina es físicamente real, es mucho más leve de lo que aparenta. Por tanto, esta ansiedad, aunque existente, podría estar multiplicada en la mente del fumador por factores sociales, situaciones de estrés o sus propios temores, lo que, de ser cierto, agregaría un componente psicológico muy importante a la adicción física. Los problemas de salud a los que se exponen quienes son presas de esta enfermedad son innumerables. Destacan los problemas cardiovasculares, como hipertensión y riesgo de ataque cardiaco. También se encuentra el riesgo muy elevado de padecer diferentes tipos de cáncer, donde el de pulmón ocupa el primer lugar, seguido de la laringe y boca, entre otros. Por otro lado, existe el peligro latente de desarrollar EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), en donde la capacidad respiratoria se va minando poco a poco y de manera irreversible, disminuyendo la calidad de vida de quien la padece de manera dramática. Otras afecciones muy inconvenientes, son el riesgo de sufrir de colesterol elevado, envejecimiento prematuro de la piel, osteoporosis, manchas en los dientes o caries y mal aliento (halitosis), infertilidad primaria en los hombres, úlcera, gastritis, colitis, bronquitis, así como dificultades durante el embarazo o afecciones en el bebé. El principal problema es que muchas de estas enfermedades son silenciosas, y no dan aviso hasta que ya han afectado al organismo de manera grave. Se desarrollan muy lentamente, lo que hace que el fumador no se dé cuenta de que está alimentando un padecimiento que en la mayoría de los casos es crónico e irreversible. Sustancias venenosas El gran daño que hace el tabaquismo a los fumadores, se explica por la cantidad de sustancias nocivas que componen un cigarrillo. Cada vez que se inhala el humo del tabaco, se introducen al organismo más de cuatro mil sustancias nocivas, entre las que destacan monóxido de carbono, dióxido de carbono, cianuro de hidrógeno, amoniaco y partículas de plomo y arsénico, entre otras. En cuanto a los tipos de cigarrillos conviene saber esto. Los cigarros lights son más perjudiciales que los normales por dos razones principalmente. En primer lugar, durante su producción se les añade diversos productos químicos que contienen nitrógeno, lo que los hace más dañinos. Además, debido a que tienen un poco menos de nicotina, comúnmente se inhalan de manera mucho más profunda para que cumpla con los requerimientos de esta sustancia, a los que el organismo ya está acostumbrado. Otro de los penosos y muy injustos aspectos del tabaquismo, es que incluso miles de personas que no fuman, y que se exponen frecuentemente al humo del cigarrillo, llamados fumadores de segunda mano o pasivos también padecen las mismas complicaciones de salud. Debemos de tomar en cuenta, que en cuanto a espacios cerrados, no hay un radio seguro en el que podamos decir que estamos a salvo de las sustancias nocivas del humo. En este sentido, las “áreas de no fumar” de los sitios públicos no están libres de contaminación por el cigarrillo. Es muy importante destacar también, sobre todo en aquellos adultos que están iniciando una familia, que son mayores las posibilidades de que los hijos de fumadores se conviertan también en fumadores, y a muy temprana edad. Esto como resultado de la imitación y de la facilidad con la que los niños y adolescentes pueden disponer de cigarros en su propia casa. Las estadísticas se elevan cuando es la madre quien fuma, ya que pasa generalmente más tiempo con los hijos. Adicionalmente al detrimento de la salud, de la propia y la de los seres cercanos, los costos económicos resultan considerables. Si tan sólo hiciéramos el ejercicio de ver cuánto gastamos en cigarrillos al año, veríamos que podríamos destinar esta cantidad a algún otro rubro que actualmente quizás no podemos considerar dentro de nuestros gastos, como podría ser el pago de un gimnasio, ropa o diversiones.

El mecanismo de la adicción Alguna vez se ha preguntado, ¿por qué fuma? Y si ya lo ha intentado, ¿por qué es tan difícil dejar de fumar? La razón se encuentra en la nicotina, una de las principales sustancias que componen el tabaco y que es altamente adictiva, incluso más que la cocaína. Al ingresar en el organismo, la nicotina se transporta a lo largo de 300 o 400 millones de alveolos y en menos de 10 segundos llega al cerebro. Aquí, esta sustancia promueve la liberación de dopamina, que es una hormona que normalmente se libera cuando estamos experimentando sensaciones de bienestar, por lo que nos induce a un estado de placer. Es por esta razón que nos acostumbramos a vivir con esta sensación placentera de manera permanente, y más aún, un cigarrillo se hace imprescindible en los momentos en que nos sentimos inseguros, preocupados, ansiosos o deprimidos, ya que gracias al cigarrillo desaparecen estos factores negativos. El efecto de satisfacción que nos brinda un cigarrillo dura aproximadamente media hora, por lo que la necesidad de mantenernos en un estado de ánimo “elevado”, induce a muchas personas a fumar incluso más de una cajetilla al día. Por otro lado, el cigarro forma parte de un esquema social, difícil de abandonar. En las reuniones con amigos, donde se comparte vino o café, el cigarrillo llega a formar un elemento imprescindible, que estimula y da seguridad durante la convivencia. Sin éste, el fumador se siente incómodo, y puede tener dificultad incluso para mantener una conversación o asociar ideas.

El principio para dejarlo Cuando tratamos de dejar de fumar sin ningún tipo de apoyo resulta muy difícil, ya que al suspender el suministro de nicotina al que está fuertemente acostumbrado el cerebro y el organismo, se sufre del casi insoportable síndrome de abstinencia. Éste consiste en sensaciones de irritabilidad, nerviosismo, mal humor, depresión y hasta insomnio y estreñimiento; tan difícil de sobrellevar, que la mayoría de quienes lo sufren prefieren volver a fumar, en lugar de padecer esto. Por lo tanto, hay que tener muy claro que dejar de fumar no es una cuestión de fuerza de voluntad. Es necesario que a este problema se le considere como una enfermedad que requiere de un tratamiento integral para solucionarlo. Además de la fuerza de voluntad, es necesaria la atención de un médico que evalúe las particularidades de cada fumador, es decir, sus patrones de conducta relacionados con el hábito de fumar, para que establezca un tratamiento dirigido a su caso en particular. En el caso de un adulto que ha fumado durante 30 o 40 años, su dependencia al cigarrillo es más de tipo físico, pero en el caso de un adolescente, es generalmente de tipo emocional. Algunos productos que se utilizan como auxiliares para dejar de fumar son las gomas de mascar o parches de nicotina, que sustituyen el suministro de esta sustancia al organismo. Por otro lado, un medicamento muy avanzado para dejar de fumar, y de reciente puesta en el mercado se llama Chantix. Este medicamento actúa produciendo el mismo efecto de satisfacción que la nicotina de cigarrillo, pero moderadamente, lo que ayuda a los fumadores a mantenerse más tiempo sin fumar. De manera complementaria, ofrece la ventaja de reducir los síntomas de ansiedad que se experimentan cuando siendo adicto al cigarro, se suspende el hábito de fumar. Adicionalmente, si durante el tratamiento se fuma, la sensación que produce el cigarro será muy desagradable, por lo que se abstendrá la persona de fumar. Lo importante es saber que si ha tomado la decisión de dejar de fumar, no está solo. Hay varias clínicas especializadas para dejar de fumar tan sólo en la Ciudad de México. En éstas se cuenta con personal profesional y capacitado, médicos y psicólogos, principalmente, que podrán apoyarlo para que logre su propósito de una manera exitosa. Dejar de fumar lo hará sentirse mucho más sano, libre por no depender de una adicción para sentirse bien, con más vitalidad y a salvo de muchas enfermedades que podrían afectar dramáticamente su calidad de vida, o la de las personas más cercanas a usted. El mejor momento para tomar la decisión es éste, no lo deje pasar.

Organizations

Pages about organizations introduce the group, and should describe its engagement in education, connected digital networks, and access to knowledge, in all relevant languages.

Partners and the like

  • ...

Community groups and local chapters (see also #Regions below)

  • ...

Volunteers] and community members

  • ...


Regions

Articles about regional groups should describe the region and the groups and organizations in them, and the extent of deployments, educational efforts, and user groups in that region. They should link to specific pages for each regional chapter or user group. The general page about OLPC efforts in South Carolina, for instance, should be South Carolina, not OLPC South Carolina (which may exist if an organized group using that name exists; in the case of Illinois for instance that group would be ILXO rather than OLPC Illinois).

Article naming

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Titling a new article

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Redirects

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If you are starting a specific type of page and know that you will need to make general versions later, that's fine -- use the most generic name that is not already taken. likewise, if you are starting the "August 2007" version of a page, leave it at the general name until you have more than one instance, at which point you can start to move to archival page titles. This just helps ensure that any specific page-name is part of an ecology that includes more generic page names and overviews of the abstract topic at hand.

Links, classification, and structure

Links to other articles

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Headers

  • do NOT use H1 headers within a page (i.e., don't do =Header with a single equals on each side=). Start your hierarchy with ==H2 level header== within the body of the wiki article.

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Categorization

Every page should belong to a category (multiple categorization is possible) so when creating or editing pages, try to find a good one.

You should never create a new category until you have located at least two pages to put in that category. Edit the new category's page to explain briefly its intent and any templates that categorize in it. When you create a new category, add it to existing categories so the category itself is discoverable.

Category names are usually plural — things in the category are activities, countries, messaging ideas, etc.

Writing

Write for translation

See also Guidelines for writing for eventual translation for a more detailed description of guidelines.

Keep sentences simple:

  • Avoid idioms and extended metaphors. Where metaphors are particularly useful, try to use one that is universal and has no double-meanings.
  • Avoid subclauses or long sentences.
  • Avoid long strings of adjectives or nouns.
  • Convert sentences in unusual tenses into ones in simple tenses with extra clarifying notes.

Keep words clear and unique

  • Avoid words with ambiguous meanings.
  • Long words with clear roots can be better than short words that are obscure or have many connotations

Specific words

USB flash drive
"USB key" is confused with cryptographic concepts such as developer key.

Using advanced features

Templates

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Always add a <noinclude> purpose... Usage ...</noinclude> block explaining the purpose of the template.

Templates should be tagged with the Category:Template or one of its subcategories within the <noinclude> block

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The composing of an article based on other pages is a very powerful idea but that can quickly get out of hand as interdependencies develop (not to mention the complication for future editors to actually find the right page to edit). Still, it's a powerful (and sometimes complicated) way to reuse context in several places.

If a page is intended for transclusion in other pages, you should probably put any categorization or semantic annotation in it within a <noinclude>...</noinclude section, otherwise every page that transcludes it will get categorized and annotated.

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Some of the principles in the HIG apply across the board. For instance, walter is unhappy with the insertion of navigational elements (or is it just visual attractions?) in the middle of a page; see template talk:support-nav for a recent discussion.

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